EL PAN DE LA PALABRA: DÍA 24 DE ENERO DE 2019

Jueves, 24 de enero de 2019

En aquel tiempo, "Jesús se retiró con sus discípulos a la orilla del mar y lo siguió una gran muchedumbre de Galilea. Al enterarse de las cosas que hacía, acudía mucha gente de Judea, Jerusalén, Idumea, Transjordania y cercanías de Tiro y Sidón. Encargó a los discípulos que le tuviesen preparada una barca, no le fuera a estrujar el gentío. Como había curado a muchos, todos los que sufrían de algo se le echaban encima para tocarlo. Los espíritus inmundos, cuando lo veían, se postraban ante él y gritaban: Tú eres el Hijo de Dios. Pero él les prohibía severamente que lo diesen a conocer". La geografía que nos ofrece el texto bíblico de algún modo es también enseñanza. En efecto, se mencionan regiones de Israel (Galilea, Judea, Jerusalén), se citan las ciudades paganas de Tiro y Sidón y un territorio del sur habitado por enemigos. Todo ello nos está mostrando que la salvación de Dios es universal y no conoce fronteras. En este texto aparece muy destacada la misión sanadora de Jesús. Los que padecen cualquier enfermedad acuden con toda confianza a Jesús para ser curados. Aquella gente reconoce el poder de Jesús para sanar. También los que estaban bajo el influjo de los espíritus inmundos le proclaman como el Hijo de Dios. Señor Jesús, todos necesitamos de la vida que brota de tu persona. Tu voluntad es clara: Deseas que tengamos vida y la tengamos en abundancia. Gracias, Señor.