Páginas

domingo, 19 de octubre de 2014

NUESTRO RETO DIARIO


Nuestro reto es ser hombres nuevos, hombres de Dios. Seguros de sí mismos, amantes de los demás y cimentados en lo que trasciende nuestra finitud. Es el momento de echar fuera nuestros miedos e inseguridades. Tenemos que coger los remos de nuestra vida con fuerza y echarnos a la mar. Debemos dejar que muera el “hombre viejo” para dejar nacer al “hombre nuevo”. ¡Nacer otra vez! Ése es el reto: radiantes, esplendentes, empapados del“agua y del Espíritu de Dios”. Que podamos saludar, como san Pablo, con el corazón ensanchado a más no poder, deseando lo mejor para el otro, en una explosión de amor:

Participa con tu comentario...

Publicar un comentario